Hoy en día, la educación tiene mucha importancia en el
comportamiento, tanto en niños como en adultos, por ello deberíamos mejorarla
progresivamente. La forma de hablar es la demostración oral de la educación de
una persona y en ello se ve el nivel léxico y cultural que se tiene.
Cada día se ven más
ejemplos en la televisión de la poca educación que tienen los humoristas,
tertulianos o políticos a la hora de hablar y dirigirse al público. Como por
ejemplo, “no me calientes que no
tengo el chocho para farolillos” en series como “Aida”. Y por no hablar las
barbaridades que se ven en realitys como “Gran Hermano”, “Gandia Shore”, o “
MYHYV”. Los espectadores al oir estas groserías tienden a imitarles en el
hablar vulgar y muestran un comportamiento no apropiado.
En el entorno en el que vivimos también influye mucho la educación,
si a un niño le acostumbran desde pequeño a hablar mal, con insultos o tuteando
a un anciano, cuando se dirijan a las demás personas lo tomaran como una falta
de respeto y pensaran que es un niño maleducado y que no tendrá una buena
conducta.
En conclusión, se podría decir que las personas que hablan
incorrectamente, tienden a tener un mal comportamiento. Y la forma de educar a nuestros hijos
es muy importante para un futuro mejor.
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